El vicepresidente del Grupo Parlamentario del PRD en la Asamblea Legislativa (ALDF), Raúl Flores, aseguró que los integrantes de dicho órgano legislativo están obligados a dar respuesta a la petición de la Canadevi de destrabar la Norma 26 para la construcción de vivienda popular o social con nuevas reglas de aplicación que impidan los abusos antes cometidos.
Aseguró que ello no será suficiente si no está acompañada de un programa emergente de vivienda para trabajadores que perciben entre 7 mil y hasta 30 mil pesos mensuales, con lo que, dijo, de manera inmediata se beneficiaría a más de un millón 500 mil familias que ya cuentan con un crédito preaprobado pero que no pueden ejercerlo por el encarecimiento de la vivienda en la Ciudad de México por parte de los desarrolladores inmobiliarios.
“Estamos de acuerdo en discutirlo, yo en breve los voy a buscar y espero que eso pueda detonar en buenos resultados, porque con quienes estamos quedando mal no es con organismos como la Canadevi, sino con los más de millón 300 mil trabajadores que cuentan con un crédito y que no tiene oportunidad de ejercerlo”.
El diputado local recordó que desde la aplicación del Bando Dos de Andrés Manuel López Obrador, hace ya 16 años, desarrolladores inmobiliarios, aprovechándose de la Norma 26, hicieron vivienda residencial de manera abusiva, por lo que dijo que no se puede permitir que dichos empresarios sigan construyendo vivienda para gente de muchos recursos, por lo que el siguiente paso debe ser contar con mecanismos de respeto irrestricto de legalidad, para garantizar la seguridad de que no se van a volver a cometer abusos.
“Todos los días recibo críticas de asociaciones vecinales que me dicen que por qué se va a construir vivienda popular cerca de donde viven y yo digo que por qué no. Si hay el ánimo de atender este compromiso con transparencia no tiene por qué haber inconformidad. La ciudad no puede seguir en la ruta de despoblarse, pero no estamos pensando en tocar las zonas patrimoniales por medio de las construcciones; las colonias y barrios que tienen reserva patrimonial no se pueden tocar a través de ninguna ley por más que atractivo que le parezca a la iniciativa privada”.
Para el legislador perredista uno de los objetivos en cuanto a vivienda será desarrollar zonas habitacionales cerca de los centros de transferencia modal (Cetram) que ahora se están modernizando y dijo que el modelo conocido como sistema de actuación por cooperación (SAC) es una alternativa para generar un desarrollo mucho más ordenado.
“No podemos continuar con la dinámica de seguir expulsando a los trabajadores de la Ciudad de México que por falta de vivienda barata y por necesidad tienen que trasladarse de donde viven en el Estado de México, Hidalgo u otras entidades vecinas a sus centros de trabajo en la capital generando más tránsito, más contaminación, más caos en la ciudad. Todo por expulsar a quienes nacieron aquí, pero ya no les alcanza para vivir aquí“.
