El presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró este lunes que no tiene ninguna intención de vengarse del empresario Carlos Ahumada, detenido y liberado el pasado fin de semana en Argentina, reiterando que en su gobierno no habrá persecución política.
Durante conferencia de prensa negó que exista algún propósito para buscar que el argentino comparezca ante la justicia mexicana, justo después de que fuera vinculada a proceso la exsecretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, la semana pasada.
Cabe recordar que Carlos Ahumada participó en 2003 en la difusión de los llamados “videoescándalos” en los que entregó dinero a René Bejarano, en ese entonces secretario particular de Andrés Manuel López Obrador quien ocupaba el cargo de jefe de Gobierno del desaparecido Distrito Federal.
Sobre este episodio que manchó su nombre, el Presidente reiteró que todo fue parte de un complot en su contra en el que participaron Diego Fernández de Cevallos y Carlos Salinas de Gortari.
“Él mismo confesó en su momento, hay hasta un video que se reunió con Salinas y Cevallos para perjudicarme, sin embargo, yo no tengo ningún propósito de vengarme, ni de Salinas (SIC)”, matizó.
En este sentido remarcó que “todos los que nos hicieron daño deben de ser tratados con respeto y sobre todo no deben utilizarse las instituciones para afectar a nadie, no tiene por qué haber parcialidad, represalias, digo esto por lo que sucedió con relación a Ahumada“.