Mauricio Toledo, secretario de la Comisión de Transparencia a la Gestión de la ALDF, presentó en el pasado periodo ordinario de sesiones la Iniciativa con Proyecto de Decreto por el que se crea la Ley de Donación Altruista de Alimentos de la Ciudad de México.
“Donar alimentos no es un acto de generosidad, es ya un acto de necesidad y de justicia social; como en otros temas, la Ciudad de México debe ser vanguardia para establecer el camino para atender un problema que ya es de orden mundial y que invariablemente nos alcanzará en un futuro no lejano”, subrayó.
El diputado recordó que fue la Cumbre de Alcaldes en la Ciudad de Milán, Italia, donde se firmó el “Pacto sobre Políticas Alimentarias Urbanas de Milán” ante más de cien ciudades, y en la que participó el secretario José Ramón Amieva, en representación del Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera, y que “entre sus directrices promueve hacer frente al desperdicio de alimentos y apoyar sistemas alimentarios sostenibles, con lo que se busca reducir el impacto negativo de la pérdida y desperdicio de comida”.
En este sentido, señaló que el fundamento de su iniciativa radica en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que en su artículo 4º señala que es responsabilidad del Estado garantizar a toda persona el derecho a una alimentación nutritiva, suficiente y de calidad.
“Precepto que también propuse fuera considerado en la próxima Constitución de la Ciudad de México y fue aprobado por el Pleno”, indicó el asambleísta.
Para el caso de la Ciudad de México, continuó, tenemos confianza de que la Ley tenga mejor destino, y a ello obedece esta conferencia de prensa, pues nace de la coordinación y el acuerdo con el Gobierno de la capital y este órgano Legislativo que junto con la Ley de Donación Altruista de Alimentos, además de la Ley de Huertos, la Ley de Adquisiciones y de otros instrumentos, integran el “Sistema de Sustentabilidad Alimentaria” que implementa la Secretaría de Desarrollo Social en respuesta a las necesidades de desnutrición y falta de alimentos en la Ciudad de México.
Toledo recalcó que los niveles de desperdicio están aumentando debido a que los alimentos se desechan, no se consumen o se descomponen a causa de las malas condiciones de almacenamiento y transporte, lo que provoca enormes pérdidas económicas y hambre innecesaria.
“La Ley de Donación Altruista de Alimentos posibilita que se adopten medidas eficientes, incluyendo la re-utilización o el reciclaje de alimentos en lugar de tirarlos a la basura, lo que generaría grandes ahorros y ayuda a la lucha contra el hambre”, apuntó.
En México se desperdician más de 10 millones de toneladas de alimentos al año, que representa el 37 por ciento de la producción agropecuaria en el país, con lo que se podría evitar el hambre que padecen 7 millones de mexicanos en “pobreza extrema de alimentación”, según cifras de la Secretaría de Desarrollo Social Federal.
“El carácter y orientación de la Ley que propuse es crear conciencia y una cultura de no desperdicio de alimentos y fomentar su donación a la población menos favorecida o vulnerable”, mencionó Toledo.
Finalmente el legislador del sol azteca dijo que el buen destino y uso de este instrumento legislativo involucra al sector privado, a las organizaciones no gubernamentales y a los ciudadanos en general, su participación activa y decisiva es determinante para su implementación.