Ciudad de México a 03 de noviembre 2022.-La diputada María Eugenia Hernández Pérez, Coordinadora Temática de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Cámara de Diputados, presentó una iniciativa para instaurar el 30 de octubre de cada año como el Día Nacional del Cáncer Hepático, con el fin de concientizar a la población sobre factores de riesgo y evitar la estigmatización de los pacientes.
“Esto contribuirá a despertar la conciencia en torno a esta enfermedad, pues el reto de cáncer de hígado demanda impulsar en conjunto con los gobiernos estatales, la Federación y, por supuesto, con los gobiernos municipales e instituciones académicas, instituciones de salud y sociedad civil acciones para realizar un abordaje multidisciplinario para la prevención, el diagnóstico temprano, oportuno y el acceso al tratamiento adecuado del cáncer de hígado”.
En conferencia de prensa la morenista explicó que actualmente permea la concepción de que esta enfermedad es desencadenada, principalmente por un consumo excesivo de alcohol y la realidad es que existen otros factores de riesgo también asociados a este tumor.
La legisladora María Eugenia, del Distrito 11 de Ecatepec, Estado de México, refirió que el cáncer de hígado ocupa el séptimo lugar en incidencia por tumores malignos y es la quinta causa de muerte en México y como muchos padecimientos oncológicos, se detecta, en su mayoría, en etapas avanzadas lo que limita las opciones de tratamiento y por tanto afecta el pronóstico de vida de las personas.
La congresista subrayó la importancia de diseñar una estrategia para la prevención y atención integral de este padecimiento.
La doctora Nayelli Flores García, del Instituto de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, apuntó que un alto porcentaje de las personas que padecen cáncer de hígado fallecen debido a diagnósticos muy tardíos.
Señaló que los principales factores de riesgo que pueden llevar a una persona a desarrollar esta enfermedad es la cirrosis hepática, por un consumo excesivo de alcohol, pero también por hígado graso e infección crónica de hepatitis B y C, que por fortuna en México hay vacunas y tratamientos para estas enfermedades.
Además, también las enfermedades autoinmunes o hereditarias pueden desencadenar el cáncer de hígado, y hay poblaciones rurales más susceptibles a padecerlo, al existir una toxina que se llama aflatoxina producida por un hongo que suele contaminar ciertos granos del maíz.
Agregó que en muchas ocasiones las enfermedades del hígado no dan síntomas, por lo que es primordial prevenir yendo a revisión médica, realizarse un ultrasonido hepático cada seis meses, llevar una alimentación saludable y realizar ejercicio.
El doctor Luis Enrique Gómez Quiroz, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) destacó la importancia de comenzar a hacer conciencia de que el cáncer de hígado es un problema muy serio y es preciso promover una cultura de la prevención para evitar que lleguen casos graves.
Sostuvo que esto debe ir por dos mecanismos: la prevención de la obesidad, evitando consumir alimentos ultraprocesados, la que es rica en azucares y en grasas, y la investigación básica, clínica y epidemiológica, para tener evidencia científica y registros.
“La prevención sigue siendo la principal arma, basada en videncia que nos permita a las autoridades y a la sociedad dar pasos concretos y la mejor forma de empezar es ahora haciendo viral esta situación y alertar de que tenemos un problema en curso, pero que todavía es tiempo de tomar medidas para evitar que esto se desborde”, finalizó.