Con el objetivo de sancionar a los hombres que invadan deliberadamente los vagones exclusivos para mujeres, niñas y niños en el Metro, la diputada Paula Soto Maldonado, presentó una iniciativa para reformar la Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México.
La iniciativa propone garantizar espacios seguros en los que las mujeres, niñas y adolescentes puedan desplazarse y viajar seguras en las áreas destinadas en el Transporte Público Metro, y que dicho espacio exclusivo no se vea trastocado por ningún hombre, incluyendo servidores públicos del Sistema de Transporte Colectivo.
Asimismo, lograr que las sanciones correspondientes a la invasión de las áreas exclusivas destinadas a las mujeres, no continúen siendo únicamente de carácter conmutativo y que la sanción por este delito recaiga exclusivamente en el arresto administrativo de 36 horas.
De igual forma, realizar las adecuaciones necesarias, para que con lenguaje incluyente y claro, se establezcan señalamientos para identificar las áreas exclusivas para mujeres; así como articular una estrategia que permita informar, sensibilizar y concientizar a servidores públicos, elementos de seguridad y vigilancia (tanto públicos como privados), así como a la ciudadanía en general, para garantizar el respeto y la seguridad hacia las usuarias del Transporte Colectivo Metro.
“Esto con el fin de inhibir y sancionar de manera estricta a quien invada o amenace la seguridad de nuestra población que, lamentablemente, aún sigue siendo víctima de actos de violencia de género en algunas zonas del transporte público de nuestra capital”, subrayó.
La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género en el Congreso Capitalino, recordó que el pasado 30 de enero, un grupo de mujeres sufrió un ataque en la estación Chabacano de la línea 9 del Metro, cuando un hombre con un arma de fuego subió a uno de los vagones exclusivos de mujeres y entre amenazas gritaba: ¿quién se quiere morir?
Soto Maldonado, señaló que todos los días, dentro de las instalaciones del Metro, las mujeres, niñas y adolescentes de esta capital sufren actos de abuso y violencia de género como éste, que ponen en riesgo su seguridad y su vida.
Lamentó que en muchas ocasiones, los ataques no se limitan a una amenaza, sino que se materializan en actos de violencia como insultos, tocamientos, manoseos sexuales, capturas de foto o video sin consentimiento, muestra o fricción de genitales, golpes y abuso sexual.
La legisladora de Morena apuntó que aún cuando el Sistema de Transporte Colectivo ha establecido medidas de prevención, las sanciones por cometer este tipo de transgresiones no son lo suficientemente estrictas como para evitar que se sigan perpetrando actos de violencia
