En solo dos meses, el Sistema Puerta Violeta del Gobierno de Tecámac brindó atención a 213 personas víctimas de violencia, según el Tercer Informe de Actividades presentado por el DIF Tecámac, correspondiente a abril y mayo. La estrategia, que prioriza la atención integral y sin discriminación, consolida a Puerta Violeta como un espacio seguro y de restitución de derechos para las personas en situación de vulnerabilidad.
Del total de personas atendidas, 118 recibieron asesorías jurídicas y psicológicas especializadas, mientras que 16 víctimas fueron acompañadas durante el proceso de denuncia, informó Petra Rocío Miguel Hernández, directora general del DIF y presidenta de Puerta Violeta, al encabezar la presentación del informe.
Asimismo, cinco personas fueron canalizadas e ingresadas al Centro MIEL (Mujeres Independientes, Empoderadas y Libres de Violencia), un refugio que proporciona atención integral con enfoque de género, protección y empoderamiento a víctimas de violencia extrema.
Durante la presentación, se subrayó que se continuará con la implementación del protocolo de atención a víctimas LGBTQ+, diseñado para garantizar un trato digno, sensible y eficaz, sin importar identidad o preferencia sexual. Este protocolo responde a la necesidad de visibilizar y proteger a sectores históricamente excluidos de la atención institucional.
“Reafirmamos nuestra misión de ofrecer espacios seguros, donde las personas puedan encontrar atención, orientación y apoyo cuando más lo necesitan”, señalaron autoridades del organismo.
También estuvieron presentes Perla Lizeth Cruz Ramírez, titular de la Dirección Jurídica del DIF, y el encargado de la Dirección de Atención y Defensa de los Derechos Humanos de las Mujeres, la Juventud y la Diversidad Sexual, quien fungirá como secretario ejecutivo del sistema municipal Puerta Violeta.
En el mismo acto, se dieron a conocer avances del Programa Municipal de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, una estrategia que promueve la construcción de entornos seguros, inclusivos y protectores, particularmente para mujeres, juventudes y personas en riesgo de violencia.
Las autoridades reafirmaron su compromiso de seguir trabajando de manera constante en la prevención y atención integral de la violencia, impulsando un modelo que articula servicios jurídicos, psicológicos, sociales y comunitarios para proteger a los sectores más vulnerables.
