La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) recomienda que ante los rumores siempre hay que conservar la calma, verificar de dónde proceden y consultar las fuentes oficiales. En México, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) es la fuente oficial sobre la ocurrencia de sismos.
La dependencia recalcó que a la fecha ninguna persona e institución en el mundo han logrado establecer un procedimiento confiable para predecir temblores o determinar la inminencia de alguno. No es posible determinar la fecha, la ubicación, ni la magnitud de un futuro sismo.
Los huracanes y las erupciones volcánicas mayores son fenómenos relativamente predecibles si hay un monitoreo constante y detallado. Esto no ocurre en el caso de los temblores, incluso cuando son monitoreados permanentemente.
México es un país con alta sismicidad por lo que tiembla todos los días. Generalmente son sismos pequeños e imperceptibles para la población. Esta sismicidad se manifiesta especialmente a lo largo de la costa del Pacífico con variaciones enteramente normales.
Por lo anterior, la Protección Civil recomienda a la población lo siguiente:
• Hacer uso responsable de las redes sociales y descartar toda información que no tenga sustento científico.
• No difundir información que no esté verificada por fuentes oficiales.
• Practicar simulacros ante diversos escenarios de riesgo, entre ellos sismos, para crear una cultura en el campo de la protección civil.
• Respetar los reglamentos de construcción, pues son una de las medidas preventivas más efectivas para mitigar los daños por sismos.
El Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC) cuenta con suficiente información disponible en medios digitales para que la población sepa cómo actuar antes, durante y después de la ocurrencia de un sismo por lo que se recomienda atender esta información oficial y participar activamente en tareas de protección civil.