Con un llamado a poner a las personas con discapacidad (PCD) en el centro del diseño de la seguridad pública, la diputada federal Mónica Villavicencio afirmó que “la participación de las personas con discapacidad dentro de las dependencias es indispensable para garantizar el ejercicio pleno de sus derechos y diseñar protocolos realmente incluyentes”.
El C5 de la Ciudad de México, en coordinación con colectivos de PCD, anunció medidas para hacer accesibles los servicios de emergencia, entre ellas: registro especial de PCD en los reportes 9-1-1, ajuste de altura en botones de auxilio, tótems con sistemas adaptados de comunicación, y canales accesibles (intérpretes, texto en tiempo real, señalización táctil y auditiva).
Personal capacitado y protocolos inclusivos
El coordinador general del C5, Salvador Guerrero Chiprés, destacó la capacitación del personal de las líneas de emergencia para atender a PCD con herramientas de comunicación accesible. Agregó que estas acciones responden a la instrucción de la Jefa de Gobierno, Clara Brugada, de garantizar que “los servicios de emergencia estén al alcance de todas las personas”.
Magnitud del reto
En la capital, más de 730 mil personas viven con alguna discapacidad o limitación —de acuerdo con INEGI—, por lo que la accesibilidad en alerta sísmica, botones y tótems no es opcional, sino prioritaria.
Lenguaje respetuoso e incluyente
La directora del Instituto de las Personas con Discapacidad de la CDMX, Ruth Francisca López Gutiérrez, subrayó la necesidad de capacitar a servidores públicos en lenguaje correcto e incluyente como base del respeto al colectivo.
Con estas medidas, el C5 y los colectivos avanzan hacia emergencias verdaderamente incluyentes, poniendo a las PCD en el centro de la prevención, atención y respuesta.