El pianista Rachid Bernal ofrecerá un recital en el que interpretará a Mozart en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes el viernes 7 de febrero a las 18:00 horas.
Este evento forma parte de los estímulos otorgados a Bernal tras resultar ganador del Concurso Nacional de Piano Angélica Morales-Yamaha 2019 organizado por la Coordinación Nacional de Música y Ópera (CNMO).
El programa integra las piezas Piano Sonata No. 12 en Fa mayor K 332 de Wolfgang Amadeus Mozart; Etude-Tableaux Op.39 No. 5 de Sergéi Rajmáninov y Toccata Op. 11, compuesta por Sergéi Prokófiev. Además, después del intermedio, el joven pianista presentará la pieza Sonata para piano en Si menor S. 178 de Franz Liszt.
En entrevista, Rachid Bernal señaló que el concierto integra una serie de obras que ya había tenido la oportunidad de interpretar y ahora quiso retomar por el placer que le da tocar esas obras. “Quise ofrecer un programa variado con el repertorio clásico de Mozart y la Sonata No. 12 que consta de tres movimientos y pertenece al estilo temprano del compositor”, comentó.
Explicó que para los pianistas interpretar a Mozart es estar expuesto en todo momento ante el público, porque su música es muy delicada y transparente, y en el cual hay que buscar un sentido para hacerlo interesante al espectador; mientras que el estudio de Rajmáninov da otra noción y característica del periodo musical romántico con una pieza corta pero demandante con el drama y la desesperación.
Señaló que haber obtenido el primer lugar del Concurso Nacional de Piano Angélica Morales en colaboración con Yamaha fue un gran logro y estímulo en su carrera artística. “Obtuve el tercer premio en la edición anterior, por lo que ver el avance de estos tres años, haber mejorado de esa manera y saber que el trabajo que realicé da sus frutos, es realmente un placer y satisfactorio”.
Reconoció que presentarse ahora con un recital en Palacio de Bellas Artes es también una gran satisfacción. “Estar en este emblemático lugar es un honor, y más en una sala en la que desde pequeño tuve el sueño y la convicción de presentarme como solista”.
Consideró que en México existe el temor para el pianista por acercarse al ámbito musical, porque se piensa que es cerrado o para personas que conocen; sin embargo, reconoció que hay muchas oportunidades aquí, aunque admitió que en educación pianística se nota la diferencia al salir del país, ya que se pueden ver distintas técnicas que hay en otros lugares, aunque insistió que en México hay buenos maestros que dan bases sólidas para hacer un buen papel en el extranjero.