Mala alimentación, tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, obesidad y sedentarismo son algunos de los factores de riesgo que pueden predisponer la aparición de males gastrointestinales como síndrome de intestino irritable, enfermedad ácido péptica, reflujo gastroesofágico y algunos tipos de cáncer.
Por ello, la Secretaría de Salud estatal, a través del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), recomienda adoptar estilos de vida saludable a fin de prevenir, detectar y atender oportunamente este tipo de padecimientos que afectan la salud digestiva, ya que, en la actualidad, se estima, impacta entre el 16 y el 30 por ciento de la población adulta en México.
La dependencia precisa que, no obstante, la mayoría de quienes presentan este tipo de enfermedades recurren a la ingesta de medicamentos de libre venta, lo que puede evitar que se brinde un tratamiento oportuno y hace que se desarrollen complicaciones.
Asimismo, añade que, si bien se registran con mayor incidencia en personas adultas, también puede desarrollarse en niños, por lo que una parte fundamental es adoptar una alimentación saludable, basada en el plato del buen comer, disminuir la ingesta de productos procesados y bebidas carbonatadas, favorecer la actividad física y evitar la automedicación.
Entre los síntomas que se presentan en los males gastrointestinales destacan dolor y distensión abdominal recurrente, agruras y cambio en el patrón evacuatorio, por lo que se sugiere acudir al Centro de Salud y, de hecho, estos padecimientos son uno de los principales motivos de consulta en el primer nivel.
De igual manera, subraya que, si a pesar de llevar tratamiento persiste el malestar o se añaden signos de alarma como pérdida de peso sin causa aparente o hemorragia digestiva, es necesario acudir con el médico para descartar alguna enfermedad orgánica.
La dependencia subraya que el cáncer colorrectal es la segunda causa de muerte por cáncer de hombres y mujeres en todo el mundo; en el país ocupa el tercer lugar de frecuencia en la población mexicana, en ese contexto, recomienda a las y los adultos mayores de 50 años de edad realizarse pruebas de tamizaje de manera rutinaria, como el uso de pruebas rápidas no invasivas.
Finalmente, el ISEM reitera el llamado a la población a adoptar estilos de vida que permitan fortalecer su salud digestiva, basados en alimentación balanceada, realizar actividad física de manera regular, evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco, así como buscar atención médica oportuna.