Escribir la carta a los Reyes Magos y ponerla en el zapato debajo del árbol de Navidad es una de las tradiciones que se debe rescatar en México, a fin de que desaparezca la idea de mandarla en un globo que contamina el medio ambiente y daña a animales, destacaron padres de familia.
Señalaron que es importante enseñarles a los niños que a los Reyes Magos les gusta más bajar del cielo y visitar uno a uno los hogares en los que viven los infantes, y levantar y leer las cartitas para saber qué es lo que piden.
Apurada por encontrar en el supermercado lo que la pequeña Lucía y Marcos quieren que les traigan Melchor, Gaspar y Baltazar, la señora Juanita comentó que en su casa la costumbre es escribirles a los reyes y poner la carta en el zapato el 5 de enero por la noche. Los globos no les llama la atención.
Los pequeños saben que los Reyes Magos viven en el cielo, justo en esas tres estrellas que brillan juntas, formando una línea, y es desde unos días antes cuando empiezan su travesía por el firmamento, para llegar a la tierra y dejarles los juguetes a los niños que se portaron bien, comentó por su parte Margarita, mamá de la pequeña Isabel de cinco años.
Alrededor de las 18:00 horas, en una plaza comercial al sur de la Ciudad de México, Luis y Ángela recorren los anaqueles de una tienda para conocer los precios de los juguetes que piden sus hijos a los Reyes Magos.
“Cada año es más difícil para los Reyes dejarles a los niños los juguetes que piden, el dinero cada vez alcanza menos, pero como padres hacemos hasta lo imposible para disfrutar de esas caritas por la alegría de encontrar a un lado de su zapato lo que pidieron”, aseguraron.
Recordaron que la tradición siempre ha sido colocar la cartita en el zapato, debajo del árbol de Navidad, pero en la escuela les han enseñado a mandarla sujeta al hilo de un globo de gas; sin embargo, en casa les han dicho que deben escribirla y dejarla en su zapato.