La Ciudad de México vivió una jornada extraordinaria de tenis con la primera edición del Chaca Chaca Challenge, celebrado en el histórico Gimnasio Olímpico Juan de la Barrera, donde el mexicano Rodrigo Pacheco firmó una actuación memorable para coronarse campeón ante un público que lo acompañó con fervor desde el primer punto hasta el último. El torneo, diseñado como un formato relámpago de alta intensidad, reunió a figuras de talla internacional como Denis Shapovalov, Diego Schwartzman y Tomás Etcheverry, quienes dieron forma a un cartel pocas veces visto en un evento de este tipo en el país.
La competencia apostó por un esquema dinámico que comprimió la tensión de varios días en una sola jornada: un round robin de súper tiebreaks a 10 puntos entre los cuatro participantes, seguido por los duelos definitivos —semifinales y final— disputados a un solo set. Bajo ese ritmo vertiginoso, la concentración y la capacidad de adaptación fueron factores determinantes. Ahí, Pacheco mostró una madurez sorprendente para su juventud, sobreponiéndose a un arranque complicado para abrirse camino hasta el título.
El mexicano cayó en su primer duelo del round robin ante Etcheverry por un apretado 10-8, pero logró recomponer el rumbo con una victoria clave sobre Shapovalov y un triunfo decisivo frente a Schwartzman que le aseguró su boleto a la final. Etcheverry también avanzó con dos victorias, apuntalado por un juego sólido que había marcado diferencias desde el inicio del certamen.
El torneo dejó también momentos entrañables, como la escena en la que Shapovalov —tras ver caer a un niño recoge pelotas— le entregó su raqueta para que continuara el punto. El pequeño, ante la sorpresa general, ganó la jugada ante Etcheverry, arrancando risas, aplausos y uno de los instantes más emotivos de la jornada. Fue un recordatorio del espíritu lúdico del deporte en medio de una competencia de ritmo frenético.
En el duelo por el tercer lugar, Schwartzman se impuso a Shapovalov en un cerrado 8-5 que reflejó el equilibrio entre ambos durante todo el día. Pero la atención del público estaba puesta en la final, donde Rodrigo Pacheco entró decidido a reescribir el desenlace de su primer enfrentamiento con Etcheverry. Esta vez, el yucateco dominó con mayor claridad, imponiéndose 8-3 con un tenis agresivo, preciso y acompañado por el impulso sonoro de la afición mexicana que convirtió el Juan de la Barrera en una cancha propia.
Pacheco levantó el trofeo del Chaca Chaca Challenge 2025 como el primer campeón en la historia del torneo, un logro que llega en un momento clave de su ascenso profesional y que refuerza su condición de la principal promesa del tenis nacional. Además de los 40,000 dólares destinados al campeón, el triunfo le otorgó un espaldarazo emocional invaluable, al demostrar que puede competir y vencer a jugadores consolidados del circuito ATP.
La exitosa realización de este torneo relámpago deja ver el potencial de México para albergar competencias innovadoras que acerquen el tenis a nuevas audiencias. El ambiente vivido en el Juan de la Barrera, con un público entregado y jugadores de renombre dispuestos a darlo todo, confirma que el país tiene espacio —y demanda— para eventos que combinen espectáculo, alto nivel y verdadera competencia.
La primera página del Chaca Chaca Challenge queda escrita con el nombre de Rodrigo Pacheco, un símbolo de lo que este certamen aspira a representar: tenis de calidad, emociones intensas y un futuro aún más grande para este deporte en territorio mexicano.



