Salvaguardar la salud, sin descuidar la confiabilidad de las elecciones, reto de las autoridades electorales: consejeros del IECM

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Organizar elecciones íntegras en el contexto de una pandemia global constituye  un gran reto y responsabilidad para las instituciones electorales, las cuales están obligadas a cumplir con normas de salubridad que aseguren a la ciudadanía el derecho a votar, salvaguarden su salud, sin descuidar la confiabilidad e integridad de las votaciones, afirmaron los consejeros electorales Mario Velázquez Miranda y Bernardo Valle Monroy, al participar en el Conversatorio “Elecciones 2021: contingencia y coyuntura”. 

 

En el encuentro realizado de manera virtual, el presidente del Instituto Electoral de la Ciudad de México, Mario Velázquez Miranda, indicó que el conversatorio permitiría a especialistas ofrecer “elementos de análisis y valorar, de manera conjunta, los puntos que se deben fortalecer para proteger, tanto al personal que opera los comicios, a la ciudadanía que colabora en su organización, y a quienes acudirán a las urnas a ejercer su sufragio, en medio de esta crisis sanitaria” 

 

En la Ciudad de México, el IECM ya tuvo su primera experiencia durante la jornada consultiva de dos instrumentos de participación ciudadana en la que se dotó de gel antibacterial, guantes y cubre bocas, a la ciudadanía responsable de Mesas Receptoras de Votación y Opinión, recordó el presidente del Instituto electoral capitalino. No obstante, admitió que, conforme a nuevas experiencias, las medidas de higiene y cuidado irán cambiando en el plano nacional e internacional.  

 

Por su parte, el Consejero Electoral del IECM, Bernardo Valle Monroy, mencionó que la celebración de procesos electorales, moviliza a una cantidad importante de personas, lo que significa un alto riesgo de propagación de enfermedades; lo anterior obliga a los órganos electorales a cumplir con normas de salubridad que aseguren a la ciudadanía el derecho a votar, salvaguardando su salud, sin descuidar la confiabilidad e integridad de las votaciones. 

 

Sostuvo que las autoridades electorales y las instituciones de salud deben realizar estrategias integrales de colaboración y trabajo, con el objetivo de mitigar el riesgo del contagio por la pandemia durante las actividades del proceso electoral. “Mientras más información tengan los órganos electorales sobre datos de contagio, estadísticas, evolución, tendencia y otros aspectos relevantes de la pandemia, mejor preparados estaremos para organizar las elecciones de 2021”, adelantó el consejero Valle Monroy.  

 

En su participación, la Consejera Electoral del Instituto Nacional Electoral (INE), Dania Paola Ravel Cuevas, aseguró que momentos como los que atraviesa actualmente el país debido a la pandemia del COVID-19, y de cara a los próximos procesos electorales, son fundamentales para mantener y fortalecer nuestra democracia. “Momentos como el que atravesamos son justamente en los que debemos asegurar un sistema democrático y de libertades, en donde los derechos de todos y todas sean efectivos, donde la vida y la dignidad humana sean respetados. Nos encontramos frente a grandes retos, no solo aquellos relacionados con el COVID-19, ya que aún tenemos un gran camino por recorrer para consolidar nuestra democracia”, sostuvo. 

 

Agregó que derivado de la pandemia del coronavirus todas las actividades que realizamos se han tenido que adaptar a las recomendaciones implementadas por las autoridades sanitarias y, en esto, las elecciones no son la excepción. Esta situación, continuó, nos lleva a plantearnos varias interrogantes, entre ellas, ¿cómo llevar cabo elecciones en la nueva normalidad?, y ¿qué medidas deben adoptarse para tratar de asegurar un ambiente seguro de votación para el votante y para los funcionarios de casillas? 

 

A su vez, la Consejera Presidenta del Instituto Estatal Electoral de Hidalgo, Guillermina Vázquez Benítez, manifestó que los órganos electorales deben realizar un esfuerzo para adaptar e innovar diversos mecanismos de trabajo, los cuales han tenido que ser modificados para incorporar el uso de tecnologías; ampliar las perspectivas con las experiencias de otros países, incorporando las buenas prácticas de sus elecciones, así como buscar la colaboración entre autoridades electorales y las instituciones de salud. 

 

Refirió que el órgano electoral de Hidalgo enfrenta un gran reto en adaptar la función electoral por la pandemia, desarrollando e implementando la sistematización de la información al interior del instituto, para conjuntar el trabajo de cada una de sus áreas. Enfatizó que, si bien el proceso electoral está en pausa, las actividades para su organización siguen adelante y una de éstas es la producción y diseño de documentos electorales; además, se trabaja de manera remota con los partidos políticos, en actividades como el registro de candidaturas en línea, entre otras actividades.  

 

Finalmente, la Consejera Electoral del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Coahuila, Karla Verónica Félix Neira, consideró que, ante la pandemia por el COVID-19, la responsabilidad de las autoridades electorales es evitar una crisis política, por ello se debe dejar claro que las elecciones se tienen que celebrar, ya sea modificando las formas y los tiempos. Por ello, explicó que en ese órgano electoral le están apostando al uso de nuevas tecnologías, tales como la realización de sesiones de manera virtual, registro de candidaturas en línea, lectura de los paquetes electorales por medio de lector de código de barras para agilizar los tiempos y se prevé la realización de debates en línea de candidatas y candidatos, entre otras acciones.    

 

Indicó que los retos para los próximos comicios es hacer efectivo el derecho a la participación política a través del voto cuidando la salud de los que participan emitiendo su sufragio, así como de los que intervienen el en proceso electoral como capacitadores, funcionarios de mesas directivas de casilla, asistentes y supervisores electorales, observadores electorales e integrantes de los partidos políticos. Asimismo, dijo que se debe incentivar la participación ciudadana, tomando todas las medidas sanitarias necesarias para minimizar los miedos y los riesgos por la pandemia.