La Artritis Reumatoide (AR) es considerada una enfermedad crónico degenerativa no transmisible, que afecta la movilidad de las articulaciones al grado de llegar a imposibilitar al paciente para realizar actividades sencillas como pueden ser levantarse de la cama, vestirse o comer.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México más de un millón de personas padecen AR. Este padecimiento se registra principalmente en la población de entre 25 y 50 años de edad, siendo las mujeres las más afectadas.
Actualmente no existe una cura para esta enfermedad, sin embargo, existen medicamentos y tratamientos complementarios que ayudan a controlar y aminorar sus efectos. En este sentido, la alimentación juega un papel determinante, ya que cuando el cuerpo obtiene los nutrientes adecuados se puede mejorar la salud física y emocional del paciente.
La E.N.C. Isis Bernáldez, nutrióloga Concierge en Grupo SOHIN, comparte algunas recomendaciones para mejorar la alimentación de personas con artritis reumatoide:
Alimentación variada.- Aunque no existe una dieta específica para AR, diversos estudios han mostrado buenos resultados con dietas antiinflamatorias como la mediterránea que están basadas en una alimentación variada con alto consumo de alimentos frescos (frutas, verduras, legumbres y cereales integrales, carnes magras como pescado y pollo) y alimentos ricos en omega 3, evitando alimentos procesados y refinados.
Consumir fitonutrientes- Los fitonutrientes son sustancias que sirven para proteger las células, además de contar con acción inflamatoria y antioxidante; se encuentran principalmente en frutas y verduras como tomates, ajo, cebolla, frutas amarillas y naranjas, verduras de color verde obscuro; además de otros alimentos como té verde y chocolate negro.
Grasas saludables. – Las grasas saludables constituyen un elemento esencial en cualquier dieta, además son una gran fuente de energía. Algunos alimentos que las contienen son aguacate, nueces y aceite de oliva crudo.
Omega 3: Según algunos estudios, los alimentos ricos en omega 3 ayudan a disminuir el proceso inflamatorio, estos pueden encontrarse en alimentos como: salmón, sardina, atún, nueces, avena, espinacas, linaza y semillas de calabaza.
Evita productos AGES. – Un producto final de glicación avanzada o AGE, es aquel que contiene toxinas que aparecen cuando los alimentos son calentados, a la parrilla o fritos. Los AGE dañan algunas proteínas del cuerpo y pueden generar inflamaciones severas.
Consulta a tu nutriólogo. – Pero lo más importante es consultar a un nutriólogo que pueda diseñar un plan de alimentación ideal considerando alergias y necesidades de cada paciente en particular.
La alimentación no puede curar la artritis, pero sin lugar a dudas, hará que el paciente se sienta mejor y pueda llevar un estilo de vida más saludable.