La diputada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Gabriela Quiroga, pidió a la Secretaría de Educación Pública (SEP) y a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), no permitir la entrada del Pin Parental en las escuelas de ningún estado del país y de la Ciudad de México, ya que representa un retroceso en la educación de las y los niños, así como de las y los adolescentes.
Lamentó que esta iniciativa impulsada desde España en enero de este año, que busca que los padres de familia decidan si sus hijos pueden recibir o no educación en temas de sexualidad, reproducción y género en las escuelas a nivel primaria, secundaria y preparatoria, haya llegado a México sabiendo que amenaza la educación y viola sus derechos.
“No podemos permitir que esta iniciativa siga llegando a ningún otro estado ni a la Ciudad de México, copiar una propuesta de un partido de ultraderecha no es legislar, es atentar contra los derechos humanos de las personas más vulnerables,” agregó.
Explicó que aunque la iniciativa propuesta por el Partido de Encuentro Social (PES) en el estado de Nuevo León fue rechazada, hace unos días se aprobó en Aguascalientes, lo que significa un retroceso en la educación de México, ya que podría ocasionar graves consecuencias como un aumento en el número de embarazos adolescentes, en enfermedades de transmisión sexual, así como en la violencia contra la mujer.
Por ello pidió a la SEP y a la CNDH no permitir que se comenta este atropello a pesar de que los legisladores hayan aprobado la propuesta, e intervenir a la brevedad, ya que es obligación del Estado elaborar planes de estudio en donde garanticen una educación laica, y no dejar que esta reforma vulnere los derechos de las y los niños al dejar que se prescinda de información esencial para su salud y desarrollo.
Subrayó que esta reforma a la Ley de Educación es ultraconservadora, moralina y viola lo dicho en que el Artículo 3° de la Constitución, que señala que la educación deberá ser laica y mantenerse por completo ajena a cualquier doctrina religiosa, con un enfoque científico, contra la ignorancia, la servidumbre, los fanatismos y prejuicios.
“Es muy grave negar la información sobre sus derechos de salud sexual y reproductiva a las niñas, niños y adolescentes, es un retroceso no reconocerlos, no visibilizarlos y no permitirles informarse, e incluso encaminarlos a una vida llena de tabús, mentiras y de ideas moralinas que traerán como consecuencia un incremento de abusos sexuales infantiles, violencia de género y discriminación”, agregó.
Advirtió que con este veto se estaría dejando de ayudar a las y los niños a prevenirse de todas las violencias, pero en especial de la sexual, así como de los embarazos no deseados y de enfermedades de trasmisión sexual, temas que son sumamente delicados en el país, ya que de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México ocupa el primer lugar en abuso sexual infantil con 5.4 millones de casos por año.
Por lo que no podemos permitir que los padres impidan informar a sus hijos sobre sus derechos de salud sexual, y más cuando el embarazo infantil es resultado de la violencia sexual que se ejerce en contra de las y los niños, así como de las y los adolescentes.
Finalmente, Gabriela Quiroga, hizo un llamado a los legisladores para sacar de la agenda temas conservadores y no permitir que gane su homofobia y discriminación con los temas sexualidad, género y de la comunidad LGBTTIQ, que además ocasionará que exista una segregación en la educación basada en prejuicios de los padres.
“Los padres no siempre tienen los conocimientos adecuados sobre la sexualidad, por eso como madre y legisladora no podemos pasar por encima de los derechos de nuestros hijos”, añadió.
