Si el PRI gana el Edomex, será en medio de la duda y el descrédito: Crespo

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MEX84. LEÓN (MÉXICO), 01/07/2012 .- Una mujer emite su voto hoy, domingo 1 julio de 2012, en un puesto de votación ubicado en la ciudad de León del estado mexicano de Guanajuato. Se elegirán un nuevo presidente, 128 senadores y 500 diputados federales y se definirán centenares de otros cargos públicos, hasta un total de 2.127 puestos de elección popular. Las urnas estarán abiertas durante diez horas. EFE/LEOPOLDO SMITH MURILLO
*AMLO aprovechó el proceso electoral para promocionar su candidatura presidencial
*El único que pude competirle a López Obrador en el 2018, es el PAN

 Si el PRI gana el próximo 4 de junio la gubernatura del Estado de México, será con un margen muy pequeño  de uno o dos puntos, rodeado de impugnaciones, dudas y descrédito, afirmó el analista político José Antonio Crespo quien señaló que el tricolor ya perdió mucha de su fuerza y credibilidad de cara al 2018.
Durante su participación en el Programa “La Agenda de Carlos Ramírez y Roberto Vizcaíno”, el politólogo enfatizó que la posible victoria del PRI en territorio mexiquense estará rodeada de muchas dudas por todo lo que se ha dado a conocer en las últimas semanas como han sido los operativos de compra de voto, el uso de programas sociales y la participación de funcionarios públicos federales en los actos de campaña.
“Si gana el PRI, es por el aparato a pesar del candidato, será a pesar Del Mazo y NO gracias a Del Mazo, porque ahí estaba una buena opción con la que hoy es Secretaría de Educación en el Edomex, ella era una mucho mejor candidata que Del Mazo”, dijo.
Alfredo Del Mazo, destacó el analista, pudo ser el candidato adecuado hace seis años, pero ahora se le ve como el Heredero del Grupo Atlacomulco, como una persona de origen muy pudiente y como el primo del presidente Enrique Peña Nieto, quien hoy tiene la más baja popularidad.
Todos esos elementos y los escándalos de corrupción, la malas cuentas que esta dando esta administración, serán un lastre para que cualquier candidato del PRI que quiera ser aspirante a la Presidencia de la República en el 2018, advirtió.
“El PRI perdió la oportunidad de demostrar que era distinto y que había aprendido de sus errores en la derrota. Es por eso que será difícil que logren tener a un candidato que pueda estar en una situación competitiva para el 2018”, sostuvo.

AMLO, el único que compitió en éstas elecciones
Al referirse a la figura del líder nacional de Morena, Andres Manuel López Obrador, el analista político destacó que AMLO usó el proceso electoral en los estados para promocionar su candidatura presidencial.
“Aprovecho esta campaña para transferir su polaridad a su candidata Delfina Gómez, cosa que fructificó porque en realidad quién compitió fue López Obrador. Independientemente de las virtudes y defectos de Delfina Gómez, si ella hubiera sido candidata de otro partido, con su mismo discurso habría sacado menos de tres puntos”, dijo.
López Obrador, enfatizó Crespo, fue el candidato que aprovechó todos los actos de campaña de sus candidatos en los diferentes estados para tomar la palabra, aparecer en la mayoría de los espots publicitarios. Gane o pierda el Estado de México, AMLO uso cada espacio para impulsar su campaña presidencial.
Hoy por hoy, afirmó el analista político, quién se puede enfrentar a López Obrador de cara al 2018, será el PAN porque el PRI ya esta ubicado en el tercer lugar, gane o pierda el Edomex.
Al referirse al posible candidato del PAN, “es probable que surja algún candidato que sea competitivo a pesar de las divisiones internas, el partido es fuerte. Aunque Josefina Vázquez Mota cayó estrepitósamente hasta el cuarto lugar, no veo que el PRI vaya contender contra López Obrador en el 2018, sino al PAN”.
Sobre la Alianza PAN-PRD de cara al 2018, José Antonio Crespo señaló que sería eso factible y conveniente para ambos partidos, incluso pudo ser benéfico que en el Edomex hubieran competido juntos a favor de Zepeda con muchas posibilidades de ganar en el Estado de México.
Sin embargo, para el 2018 se ve difícil que alguno de los candidatos panistas quiera ceder su lugar para favorecer la candidatura de un tercero que no sea panista y al revés, que un perredista apoye a un panista, por ejemplo Ricardo Anaya, porque eso va a provocar que muchos militantes se vayan a Morena, finalizó.