Por JOSÉ GARCÍA SEGURA
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero se mostró “solidaria”, con el paro femenino del 9 de marzo “contra la violencia” y tras los feminicidios de Ingrid Escamilla y la niña Fátima.
“Ni una mujer en las calles, ni una mujer en los trabajos, ni una niña en las escuelas, ni una joven en las universidades, ni una mujer comprando”.
Doña Olga apoya y no: seguirá trabajando.
La NO primera dama, Beatriz Gutiérrez se sumó a la protesta, pero solo hasta que en la casa presidencial le dijeran que no se juntara con los conservadores.
En un anuncio publicado en su cuenta de Instagram se pregunta: “¿qué harían sin nosotras?”.
horas después pidió a sus seguidores apoyar al presidente: “¡El nueve me mueve!” El presidente Obrador ve a la derecha, a los conservadores detrás de la protesta según la cual ninguna mujer se presentaría a trabajar, ni
ir a la escuela, salir a la calle o comprar bienes o servicios.
Como en Argentina (2016), Estados Unidos (2017) y España (2020) las mujeres mexicanas mostrarán musculo, respaldadas por la UNAM y el IPN universidades de los estados, gobernadores del PAN, PRI, MC y MORENA,
de presidentes municipales y ONG, s.
Según se sabe, la economía nacional dejaría de percibir unos 40 mil millones de pesos si la mitad de la población dejara de laborar en fábricas y oficinas y si se contabilizara el trabajo en casa.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), los estados violentos para las mujeres son Guanajuato, Nuevo León, Puebla, Sinaloa, Tamaulipas, México y la CDMX.
Mil mujeres asesinadas en 2019; 73 en enero y un número aún no determinado en febrero.
Un reporte del organismo refiere que dos de cada 3 mujeres enfrenta “algún tipo de violencia”.