Sin aval republicano, Trump ya no puede presionar por su muro

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Dentro de la Casa Blanca, el equipo del presidente Donald Trump está cada vez más consciente de que su jefe está atrapado frente a un Partido Republicano que no está dispuesto a respaldar otro cierre de gobierno o una declaración de emergencia para construir su muro fronterizo.

De acuerdo con declaraciones de funcionarios del gobierno federal, citados por el portal Politico, el magnate está en una posición desconocida: preparado, “potencialmente”, para aceptar un compromiso impuesto sobre él por el Congreso.

Hace días, Trump llamó al comité encargado de cerrar un acuerdo de seguridad fronteriza “una pérdida de tiempo”. Sin embargo, ayer pareció más suave al admitir la idea de un acuerdo bipartidista, después de reunirse con el presidente de Apropiaciones del Senado, el republicano Richard Shelby. Más tarde, Shelby dejó abierta, tras informar del encuentro, la esperanza de que el presidente estuviera dispuesto a apoyar cualquier cantidad de dinero para la frontera, incluso si no eran los 5 mil 700 millones de dólares que estaba buscando, dijo un asistente citado por el medio estadounidense.

“Desearía que ambos (Trump y los demócratas) encontraran la manera de declarar la victoria en cada lado. Estoy cansado de hablar de todas esas cosas sin parar, esa es mi posición”

Johnny Isakson
Senador republicano

“Considerará cualquier tipo de propuesta razonable… hay una franqueza general”, dijo el senador Thom Tillis, un senador del Partido Republicano que se mantuvo con Trump en medio del cierre de 35 días. “Hay una promesa de campaña y tiene que haber un gran progreso. No es que vaya a consentir. Pero creo que está mostrando buena fe”.

“Intencionalmente no han establecido un número (presupuesto) firme”, dijo la senadora republicana Shelley Moore, miembro del comité para la negociación. “Y creo que eso es para mostrar su disposición a negociar, así que eso es bueno”.

Aunque la Casa Blanca ha trabajado para preparar una declaración de emergencia invocando los amplios poderes ejecutivos del presidente, varios asesores han advertido que invocarla alienaría a algunos conservadores que de otro modo han sido leales a la Casa Blanca.

“Hay una promesa de campaña y tiene que haber un gran progreso. No es que vaya a consentir. Pero creo que está mostrando buena fe”

Thom Tillis
Senador republicano

Los legisladores y activistas de la derecha han sido aliados del presidente para las nominaciones judiciales y han enfatizado que una declaración de emergencia podría sentar un precedente para que un futuro presidente demócrata tome medidas de gran alcance sobre el cambio climático o la violencia con armas de fuego.

Otro aliado cercano a Trump, el senador Lindsey Graham, dijo que el presidente parece estar dando a los negociadores el espacio que necesitan para hacer un trato: “Hasta ahora, todo bien”.

El senador Mike Lee, quien una vez fue considerado por Trump para una vacante en la Corte Suprema, se acercó al jefe de personal de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, a fines de diciembre con sus preocupaciones sobre el uso de los poderes ejecutivos de emergencia para financiar un proyecto del muro fronterizo, según dos fuentes familiarizadas con el caso.

“Declarar la emergencia nacional sentaría un mal precedente en los conservadores que creen en la separación de poderes, podrían arrepentirse”

National Review
Comité editorial conservador de Wall Street Journal

Trump también puede perder un voto en el Senado si sigue con una declaración de emergencia. Sólo cuatro republicanos tendrían que oponerse a él para que se aprobara una resolución de desaprobación, un resultado vergonzoso que lo obligaría a emitir su primer veto.

“Desearía que ambos encontraran la manera de declarar la victoria en cada lado”, dijo el senador Johnny Isakson. “Estoy cansado de hablar de todas esas cosas … sin parar, esa es mi posición”.

Mientras tanto, tanto la Casa Blanca como el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, han señalado que se oponen a firmar otro proyecto de ley de gasto a corto plazo para permitir que las negociaciones se extiendan el próximo viernes.

“Realmente tenemos hasta el domingo para presentar los papeles. Así que tendrán que estar de acuerdo en las próximas 48 horas, si va a haber un acuerdo ”, dijo el senador John Thune. “Odio aumentar las expectativas, pero hay un optimismo creciente de que puede haber algo allí”.Eso hace que sea aún más probable que Trump se vea obligado a elegir entre dos opciones desagradables: un acuerdo bipartidista servido por los legisladores, o una acción ejecutiva que no llegue a una declaración de emergencia.

El Dato: El magnate aseguró, sin evidencias, que una flotilla de autobuses se dirigía con migrantes a la frontera; un argumento para elevar la necesidad de levantar el muro.

…Y los demócratas confían en su ventaja
La portavoz de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, está confiada en que el gobierno federal no volverá a cerrar, incluso cuando el presidente Trump aumenta la presión sobre su muro fronterizo.

“No habrá otro cierre”, aseguró Pelosi durante una media hora de entrevista en su oficina del Capitolio. “No, no va a suceder”.

Después del cierre de 35 días, y la conmoción política que Trump y los republicanos tomaron durante el estancamiento sin precedentes, Pelosi predijo que los líderes del Republicano no volverán a tomar ese camino.

Pelosi dijo que cree que un panel bipartidista de la Cámara de Representantes y en el Senado, que negocia sobre la seguridad de la frontera, llegará a un acuerdo antes de la fecha límite de financiamiento del 15 de febrero.

Además, se comprometió a respaldar cualquier acuerdo que surja de esas conversaciones, aun cuando se mantenga firme en que no habrá nuevos fondos para el muro, la principal promesa de campaña del magnate.