La argentina Nadia Podoroska se convirtió en la primera mujer en la era abierta que supera la fase previa y alcanza las semifinales del Abierto de Francia tras despachar por 6-2 y 6-4 a la tercera preclasificada Elina Svitolina, primera tenista albiceleste en semifinales en Roland Garros desde 2004, cuando lo consiguió Paola Suárez.
La número 131 del mundo y que aseguraría ingresar al Top 50 de la WTA, jugó agresiva de principio a fin , en una jornada colmada de ráfagas de viento, que supo aprovechar para vencer a la ucraniana, que derrotó a la mexicana Renata Zarazúa en la segunda ronda del abierto francés.
En su mejor partido como profesional, Podoroska siempre estuvo al ataque para presionar a Svitolina, quien fue eliminada por tercera vez en esta intancia en las canchas de la capital francesa.
La prueba del juego agresivo de la argentina es que logró 30 tiros ganadores, pero también cometió una treintena de errores no forzados.
La jugadora sudamericana ganó el duelo estratégicamente, ya que abría a su oponente con tiros cruzados para enviarla al fondo de la cancha y culminaba los puntos con drop shots, que desgastaron físicamente a la quinta clasificada en la Asociación Femenina de Tenis (WTA).
La argentina definió su tercer match point con un winner cruzado, rompiéndole el saque a Svitolina por octava ocasión. Culminada la obra, Podoroska lanzó su raqueta por los aires y apretó los puños en señal de victoria.
“Me cuesta decir algo ahora. Gracias a todos por el aliento. Estoy muy feliz”, declaró tras el triunfo, que dedicó a una persona en Argentina que estaba pasando por un mal momento y esperaba que lo hecho en la pista le diera ánimos para salir adelante.
Podoroska de 23 años ni siquiera había encadenado victorias sucesivas en el circuito de la WTA. Tampoco se había medido contra una jugadora del Top 20 del ranking, ya que solamente le había ganado a la 27 de la clasificación Yuliya Putínseva.
Este Roland Garros representó apenas la segunda presentación de la nacida en Rosario en el cuadro principal de un Grand Slam, y la primera desde que cayó en la primera ronda del Abierto de Estados Unidos de 2016.
Podoroska se convirtió en la primera mujer argentina en las semifinales de un grande desde que Paola Suárez alcanzó la misma instancia en el Roland Garros de 2004, Clarisa Fernández en 2001, Raquel Giscafré en 1974 y las cinco ocasiones que Gabriela Sabatini alcanzó esta fase, la última en 1992.
También es la primera jugadora que sortea la fase de clasificación para meterse entre las cuatro mejores de un Grand Slam desde Alexandra Stevenson en el Wimbledon 1999.
No tuvo miedo escénico ante una experiencia inédita en su carrera. Mostró todo su repertorio de golpes para jugar en la superficie de arcilla, apelando con maestría a los ‘drop shots’.
En un hecho histórico, podría medirse en la final por primera vez en la historia del torneo en su era abierta, contra otra oponente proveniente de la fase previa de clasificación, si la italiana Martina Trevisan derrota a la polaca Iga Swiatek, en la otra semifinal.
Además, la estadunidense Danielle Collins alcanzó los cuartos en París por primera vez tras derrotar 6-4, 4-6 y 6-4 a la tunecina Ons Jabeur.