Taxistas de la Ciudad de México se manifestaron a las afueras del Congreso local para acabar con lo que consideran una competencia desleal ante el servicio de transporte con aplicación.
Los manifestantes llegaron al recinto de Donceles y Allende con sus vehículos, provocando el cierre de las calles aledañas.
Los inconformes solicitaron más apoyo por parte del Gobierno local, considerando todos los gastos y trámites que tienen que hacer para poder operar.
“Lo que estamos pidiendo es que le permitan al taxi crecer, pero como lo va a hacer ante una competencia desleal porque a una empresa le dan una concesión para que meta 10 mil autos y tú como propietario tienes derecho a uno”, expuso uno de los manifestantes.
Esta mañana, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, informó en conferencia de prensa que las empresas que ofrezcan el servicio de transporte vía app deberán, al igual que los taxistas, portar una identificación visible la cual especifique para qué empresa trabajan, además ahora será requisito tramitar la licencia tipo E-1.
De esta manera se pretende que los servicios para taxis y de aplicación –como Uber y Cabify- con el objetivo de que “exista piso parejo entre ambos servicios”.
Además, para poder operar, las empresas tendrán que pagar la revista de los vehículos que ofrezcan el servicio por aplicación.
Los taxistas avalaron esta decisión anunciada por el gobierno local y esperan que con ello las condiciones de trabajo para ambas modalidades de transporte sean equitativas.