Este viernes funcionarios del gobierno de Estados Unidos se reunieron, por separado, con el presidente Enrique Peña Nieto y el candidato ganador de la elección presidencial, Andrés Manuel López Obrador, encuentros en los que se abordaron temas como el TLCAN, migración, seguridad y las bases de entendimiento con la próxima administración federal mexicana.
Las actividades de la delegación estadunidense de alto nivel en territorio mexicano iniciaron aproximadamente a las 10:30 horas, cuando llegaron al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, encabezados por el secretario de Estado, Michael R. Pompeo.
Además de Pompeo, la delegación del gobierno de Donald Trump estuvo integrada por los secretarios del Tesoro, Steven Mnuchin, y de Seguridad, Kirstjen Nielsen, así como el asesor senior de la Casa Blanca, Jared Kushner, quienes primero se reunieron con el presidente Enrique Peña Nieto en la residencia oficial de Los Pinos.
En el encuentro con el mandatario mexicano, los funcionarios estadunidenses y los de México dialogaron sobre la relación bilateral y Peña Nieto solicitó la pronta reunificación de las familias separadas en la frontera, así como agilizar la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), para concluirla lo antes posible.
Posteriormente, la comitiva de Estados Unidos se trasladó a la Embajada de ese país en México, donde dialogó con personal y sus familias, y luego se dirigió a la casa de transición de Andrés Manuel López Obrador, candidato ganador de la elección por la Presidencia de México.
Una vez en las oficinas ubicadas en la colonia Roma de la delegación Cuauhtémoc, los funcionarios norteamericanos dialogaron con López Obrador, quien entregó al secretario Michael Pompeo una propuesta de las bases de entendimiento con la administración del presidente Donald Trump para los próximos años.
De acuerdo con Marcelo Ebrard, quien dio detalles del encuentro, la propuesta entregada contiene los pilares principales de la relación México-Estados Unidos, que tienen que ver con el comercio y la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Así como la perspectiva de desarrollo en México en los próximos años para evitar que los mexicanos tengan que migrar por pobreza o inseguridad, y un diálogo “muy fructífero” en el futuro en materia de seguridad.
Al término de la reunión con López Obrador, Mike Pompeo, Steven Munchin y Jared Kushner, se dirigieron a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para un encuentro con el canciller Luis Videgaray Caso; sin embargo la secretaria de Seguridad, Kirstjen Nielsen permaneció unos minutos más en las oficinas de la colonia Roma.
Más tarde, la funcionaria estadunidense se reunió con el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, quien dio a conocer que acordaron mantener el intercambio de información técnica, así como el diálogo abierto que permitan avanzar positivamente en temas de interés común, como la migración y la seguridad.
En tanto, Mike Pompeo, Steven Munchin, Jared Kushner y los funcionarios que los acompañaban se reunieron con el actual secretario de Relaciones Exteriores y su equipo, en la sede de la cancillería, donde abordaron temas de la relación bilateral, pero con especial énfasis en el tratado comercial entre ambas naciones y Canadá, y la migración.
Al término del encuentro, Videgaray Caso y Pompeo ofrecieron un mensaje a medios en donde el funcionario estadunidense destacó que los encuentros que sostuvo con el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el candidato ganador de la elección presidencial, Andrés Manuel López Obrador, ratifican que ambos países son aliados, socios y amigos.
Mientras que Videgaray afirmó que este es un momento de definición en la relación entre México y Estados Unidos, así como de una gran oportunidad, y aseguró que el Gobierno Federal trabaja con el equipo de Andrés Manuel López Obrador, en un “frente común” en la relación con la unión americana.
Luego del mensaje a medios, los funcionarios norteamericanos se trasladaron al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde ya los esperaba el avión que los llevaría de regreso a Estados Unidos, con lo que concluyó la visita oficial que ha sido considerada como fructífera.