A punto de cumplirse 10 meses del sismo de septiembre pasado, el jefe de gobierno de la Ciudad de México, José Ramón Amieva, señaló que el pendiente de más relevancia es vigilar la continuidad de la reconstrucción y que los hogares se puedan rehabilitar.
Entrevistado en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, dijo que la satisfacción no puede llegar hasta que no se tenga la reconstrucción y rehabilitación total y que se está en condiciones de empezar a plenitud con los recursos que ya están para ello.
Consideró que se deben incluir de manera clara, la totalidad de los inmuebles y estar abiertos a hacer algunos recorridos por las delegaciones Xochimilco, Tláhuac e Iztapalapa, para ver cómo van los avances en la reconstrucción.
“Y yo lo que señalaría es que tenemos que estar atentos a la reconstrucción de las casas, de las iglesias, de las escuelas y de la infraestructura”.
Lo que se pretende, dijo, es establecer con claridad y contundencia cuál va a ser el esquema de reconstrucción; que no exista duda alguna, ni que quede de lado ninguna persona que falte de atención para ello; “esa es la premisa en la que estamos”.
En relación a si ya se hizo la transferencia de los dos mil 500 millones de pesos del Fondo de Desastres, dijo que está por sesionar ya el Comité Técnico, que determinará el destino de estos recursos de este Fondo de Desastres de la Ciudad de México y lo que harán es aprobar que los recursos sean enviados a la cuenta del fideicomiso.
Sobre el hecho de que ya no insistió en el llamado a la Asamblea Legislativa a un periodo extraordinario para que se aprueben los recursos, dijo que ellos tienen su propio esquema de organización.
Ante ello, agregó, “nosotros tuvimos que tomar esta decisión y tomar recursos de un fondo de emergencia porque ahora esto se convirtió en una emergencia: la falta de recursos y una emergencia derivada de un desastre natural que tenemos que atender”.